Ciudad de México, 20 de noviembre (SinEmbargo).- Las decisiones más importantes de la vida suelen tomarse en el año previo a cambiar de década, es decir, a los 19, 29, 39 años y así consecutivamente, debido a que las personas se enfrentan a la consciencia del envejecimiento en la que consideran que es necesario buscarle un sentido a la vida, o en su caso, entran en crisis por ello.
Lo anterior de acuerdo con un estudio que realizaron en conjunto expertos de las universidades de Nueva York y California, en el que a través de distintas bases de datos notaron una constante en las edades de las personas que radicalizaban, aunque sea a corto plazo sus decisiones en cuanto a su estilo de vida, ya sea para bien o para mal, como correr un Maratón o buscar pareja o en otros casos, engañar a sus parejas o llegar al suicidio.
Para llegar a estas conclusiones publicadas en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, los investigadores revisaron en primera instancia los datos del portal de citas Ashley Madison, especializado en encuentros extramaritales, en donde encontraron un aumento considerable entre los usuarios de 29, 39 y 49 años de edad, pues de los 8 millones de hombres registrados, había más de 950 mil en estas edades. En el caso de las mujeres encontraron una tendencia similar, pero el efecto no era tan fuerte.
Para otro de sus análisis, los psicólogos Hal Hershfield y Adam Alter revisaron las cifras de suicidio del Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos de personas entre 25 y 64 años, en donde encontraron un crecimiento similar en los últimos años de una década, aunque para fines estadísticos no se considere tan relevante.
En el último de los estudios, se checaron los tiempos en los que corredores habían terminado maratones en EU, y notaron que la mayoría terminaron un 2.3 por ciento más rápido las carreras a los 29 o 39 años, comparado con su carrera siguiente y con la anterior, por lo que concluyeron que se prepararon mejor y se esforzaron más un año antes de cumplir 30 o 40 años.
Una manera de pensar ante el cambio de década es verlo como una periodo de transición de 12 meses antes de entrar a una nueva etapa de la vida, “las transiciones nos hacen dar un paso atrás, nos hacen avaluar las cosas. Cuando ya estás en medio de algo es más fácil mantener la cabeza abajo y sólo dejarse ir, pero cuando das un paso atrás es cuando dices ‘espera, déjame ver cómo va todo por aquí'”, dijo Hershfield en declaraciones publicadas en Science of Us.
Después de estudiar los hallazgos, los especialistas sugieren que en la antesala de una nueva década la gente está “particularmente” más preocupada por el envejecimiento y la búsqueda del significado de la vida, así como la importancia que le dan a el cierre e inicio de ciclos y nuevos comienzos.
Aún queda por delante definir porqué algunas personas desembocan sus periodos de reflexión “pre-cumpleaños” en comportamientos considerados negativos, como buscar aventuras fuera de su matrimonio o cometer suicidio, además de cómo la respuesta positiva de otros puede ayudar a los profesionistas a orientar a la gente hacia una formación de buenos hábitos y metas saludables. Es decir, a utilizar esta motivación que dan los finales de década de manera positiva.
